En las últimas horas, el ministro de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, declaró que la vía del dialogo aún siguen en pie para hallar una salida diplomática al conflicto en Ucrania; por otro lado, también señaló que Rusia está dispuesta a escuchar propuestas en torno a garantías de seguridad que pide Moscú.
En palabras del ministro de Relaciones Exteriores, aseguró que hay posibilidades de un acuerdo con EUA y la OTAN sobre «asuntos clave» de las garantías de seguridad que demanda Moscú, y anunció que continuarán los contactos.
Al parecer, el presidente ruso Vladimir Putin habría dado la orden de trasmitir ese mensaje, el cual se daría un día antes de la visita del canciller alemán Olaf Scholz a Ucrania en donde intentará encontrar una solución no violenta al conflicto en la frontera entre Rusia y Ucrania.
Por su parte, preocupa que la recepción del canciller alemán en Kiev sea fría e indiferente debido la negativa de Alemania de proporcionar a Ucrania armas como sí hacen otros países europeos.
Este domingo, Scholz, desde Berlín, dijo en Berlín que en su viaje a Kiev y Moscú quiere «aprovechar para de ver cómo podemos garantizar la paz en Europa».
Esta negativa de Alemania sobre el envió de armas a Ucrania ha encendido una alarma en varias naciones de Europa que si buscaron apoyar de manera armamentista al país en conflicto.
Muchos especialistas creen que esta polarización en ciertas cuestiones delicadas, podrían provocar un rebote para el comienzo de una nueva Guerra Fría del siglo XXI en donde cada nación sin participar activamente del conflicto armado tome partido por uno u otro bando.
Los países occidentales acusan a Rusia de haber desplegado más de 100.000 militares en la frontera de Ucrania con intención de invadir el país vecino, algo que, según EUA, sería inminente.