El director representante de jubilados y pensionistas en el BPS, Ariel Ferrari, estuvo en el departamento para informar e intercambiar con las directivas y allegados de la Asociación de Jubilados y Pensionistas de Rocha y de la Asociación de Pasivos de Castillos acerca del último aumento de las jubilaciones y pensiones, y los cambios de criterios aplicados en el ajuste a las pasividades mínimas que implican importantes perjuicios para los jubilados y pensionistas de menores ingresos.
El Este consultó a Ferrari sobre estos temas, quién cuestionó los cambios introducidos en los ajustes diferenciales que reciben quienes perciben una jubilación mínima, que se ubica en el entorno de los 15 mil pesos uruguayos, señalando que “hasta el momento, cada mes de julio, quienes perciben la jubilación mínima recibían un aumento a cuenta del incremento del 1° de enero siguiente, aunque no se les descontaban. En esta ocasión dejó de pagarse ese monto, y el ajuste se otorgó tomando como base lo que (los jubilados) ganaban el 1° de enero del 2021 y no el 1° de julio”, manifestó.
“Este hecho implica que del reciente aumento del 6.16% que se otorgó a los pasivo -que ya está por debajo de la inflación- los que cobran la mínima pierdan un punto y medio. Esto, sumado al aumento de los combustibles, que invariablemente provoca subas en un montón de cosas, hace que quienes cobran las jubilaciones mínimas vean aún más reducido su poder adquisitivo”, agregó.
Sobre el final, el director representante de jubilados y pensionistas en el BPS, afirmó; “esto no es una pérdida, es meterle la mano en el bolsillo a la gente más necesitada, a los más vulnerables, ya Artigas nos hablaba que los más infelices debían ser los más privilegiados, acá son los más perjudicados, porque son los que menos tienen”.