Los Encarnados acertaron la única que tuvieron en la noche de Ámsterdam y dieron la nota para meterse entre los ocho mejores de Europa. Un cabezazo del uruguayo Darwin Núñez bastó para que los lusitanos superen por 1 a 0 a los de la capital neerlandesa que no pudieron aprovechar el 2 a 2 conseguido en el Estádio da Luz.
Ajax tuvo la pelota, intentó, buscó pero falló durante los 90 minutos en los Países Bajos. Con su gente y en su casa, los dirigidos por Erik ten Hag se qudaron con las manos vacías ante un Benfica que fue paciente, aguantó, y embocó con pocas ideas ofensivas.
Los neerlandeses tuvieron la pelota y dominaron durante una hora de reloj. En el primer tiempo llegaron con riesgo en un cabezazo de Antony que se fue cerca del palo. También convirtieron un gol en los pies de Sébastien Haller pero Carlos del Cerro Grande lo anuló por offside del brasilero. Los portugueses, a esa altura, tenían la mente puesta en seguir esperando su momento.
El dueño de casa siguió con la misma tónica en la complementaria aunque se fue apagando. A los 3 minutos probó Dusan Tadic desde la medialuna pero se fue apenas alto. Un ratito más tarde, Antony cabeceó y dejó una pelota en el techo de la cueva defendida por el alemán Odisseas Vlachodimos. Todo parecía ser de Ajax o, mínimamente, Benfica simulaba conformarse con el alargue y los penales.
Cuando nadie lo esperaba y en la única que generaron los Encarnados, se rompió el cero en Ámsterdam. Alejandro Grimaldo mandó un centro desde la derecha apenas pasada la media hora del segundo período y Núñez ganó en las alturas. El uruguayo saltó más alto que Jurrien Timber y aprovechó la salida a destiempo de André Onana para meter el frentazo y desatar el festejo.
Ajax hizo sus méritos para meterse en la siguiente instancia de la Champions League aunque no estuvo fino de tres cuartos en adelante. Benfica dio la sorpresa en la noche de los Países Bajos, ganó 1 a 0, y se metió entre los mejores ocho de Europa a la espera de un nuevo rival para continuar el sueño de levantar una Orejona después de sesenta años.
