El Ministro del Interior encabezó el acto, e hizo entrega de una distinción
El pasado 27 de octubre, día de la creación de la Dirección Nacional de Bomberos, El Este titulaba “Bombero que salvó una vida no fue incluido en la nómina de reconocimientos por un nuevo aniversario de la Institución”
En el marco del aniversario nº 134, varios funcionarios fueron destacados por sus acciones del año.
Sin embargo, en el Departamento de Treinta y Tres, la población quedó aguardando por una distinción a un joven bombero, quien había intervenido en un episodio que conmovió a la sociedad.
El hecho involucró al bombero Washington Pacheco y a un poblador de la localidad de María Albina.
Pacheco había concurrido junto a su esposa a la pequeña localidad, ubicada a unos 35 kilómetros de la capital olimareña, cuya población no supera los 100 habitantes.
Dado que era su día libre, la pareja hizo propicia la ocasión para visitar a familiares residentes en María Albina, pese a lo inhóspito del clima, el cual se presentaba lluvioso, contrastando con el mes veraniego.
En determinado momento, y mientras compartía un mate con su padre, una situación en particular, puso en alerta al joven bombero; un vecino, distante a unos cuantos metros, atravesaba el patio con un banco de un modo que llamó la atención de Washington Pacheco.
Sin quitar la vista de los movimientos de aquel hombre, y ausente a la conversación que su padre continuaba manteniendo, fue testigo directo del momento en que el vecino subió sobre el banco, ajustó un nudo a su cuello y se dejó caer.
De inmediato, y aunque sobresaltado por la dramática escena, su formación profesional, sumado a su propia naturaleza, lo llevaron a atravesar rápidamente los metros que los separaban de la víctima a la cual sostuvo con firmeza hasta lograr liberarlo y tenderlo en el piso donde comenzó a brindar reanimación cardiopulmonar, mientras solicitaba la urgente presencia de médicos o personal de enfermería en el lugar.
El joven bombero hizo caso omiso al pesimismo del entorno que entendían estaba haciendo un esfuerzo en vano dado que el hombre ya no presentaba pulso y evidenciaba todas las signos de deceso.
Persistente en su intención de salvar esa vida, Washington Pacheco continuó practicando la reanimación cardiorrespiratoria mientras algunas personas acudían en la búsqueda del chofer de la ambulancia local, dado que la policlínica no contaba ese día con personal de enfermería.
El cansancio por el esfuerzo que no cesó de realizar, quedó relegado cuando el bombero advirtió las primeras señales de reanimación en el hombre cuyo corazón comenzó a latir al tiempo que era trasladado a un centro asistencial en la vecina ciudad de José Pedro Varela.
Una vez allí, el personal de la salud logró estabilizar al paciente que posteriormente se recuperó notablemente sin padecer ninguna secuela de su intento de autoeliminación.
Si bien, en su momento, la Dirección Nacional de Bomberos, un mes después de aquel episodio, concretamente en el mes de febrero de 2021 remitió una especie de diploma en el cual figura el nombre de Washington Pacheco, su grado y documento de identidad, debajo de un cabezal que señala “actuación destacada”, pero por una omisión involuntaria, Pacheco no fue incluido en la nómina de reconocimientos del 27 de octubre pasado.
Redimiéndose de este olvido, el cabo fue llamado personalmente por el propio Director Nacional de Bomberos, quien tras haber leído la noticia difundida por El Este, le anunciaba que le esperaría este martes 8 de diciembre para una ceremonia de tributo a su gran gesto.
Acompañado por su familia, el bombero acudió al acto protocolar, del cual participaron las máximas jerarquías de Bomberos, y el propio Ministro del Interior Luis Alberto Heber.