Se trata particularmente del Hotel Argentino y y de la Colonia de Vacaciones Emilio Oribe, indicando que existe “un mal manejo que ha hecho el Estado de los edificios importantes que tiene Piriápolis, que son patrimonio de la ciudad y los utiliza de una forma medio arbitraria y como desinteresada para desarrollar actividades que quizás no son las más importantes dentro de dicha ciudad”.
Las declaraciones fueron vertidas durante la pasada sesión de la Junta Departamental, donde el curul señaló que personalmente era un tema muy sensible por ser un vecino de la ciudad.
Además, indicó que ambas construcciones sufren importantes problemas en sus fachadas y que incluso en algunas partes hay riesgo de derrumbe.
Con respecto a la Colonia de Vacaciones, mostró imágenes y señalo que «ese edificio fue el primer hotel que hubo en Piriápolis, uno de los primeros hoteles de América del Sur en dedicarse al turismo y construirse en una zona netamente balnearia”, el que en la actualidad se encuentra en uso de Primaria.

En tanto, indicó que en este momento se encuentra cerrado, solamente concurre el personal que trabaja allí, maestros, que cumplen el horario porque según enfatizó el edil “no vienen niños porque está en un estado ruinoso, los hierros de la estructura están todos a la vista, los revoques están en el piso y hay lugares que son peligrosos y por eso no se están utilizando, porque hay riesgo de derrumbe”.
Por otro lado, continúo su exposición refiriéndose al Hotel Argentino, otro de los emblemáticos edificios situados en la rambla de Piriápolis, «es el primer hotel de ese tamaño en Sudamérica, inaugurado en 1933, con una cantidad de atractivos que tenía y que aún tiene, el mismo está totalmente abandonado y en una situación paupérrima en cuanto a su estado edilicio interior y exterior» expresó Gava, que además recordó que el Hotel es administrado por el Ministerio de Turismo «y lo dio en concesión ‒varias veces‒ a la familia Méndez Requena».
En ese sentido, manifestó que durante el manejo de la familia antes mencionada «el hotel tuvo un progreso importante y un desarrollo muy bueno para la zona, funcionaba muy bien y se empleó allí una cantidad de gente, por lo que fue una importante fuente de trabajo para el departamento y un gran atractivo turístico».
En la actualidad indicó que nada de esto funciona y que el edificio se encuentra con peligro de derrumbe, “porque hay lugares del lado de afuera que están cercados para que los visitantes no tengan problemas, los pretiles del edificio, que se han caído”.
Por último, exigió una respuesta por parte del Estado, para que se busque un negocio nuevo para que “que sea operativo y que funcione”.