Bajo la presidencia de José Luis Molina se destinaron $1.093.161 para la renovación mobiliaria de la Junta Departamental de Rocha. Desde la bancada opositora sostienen que el proceso de contratación presenta un “montón de irregularidades”.
José Luis Molina, edil por el Partido Nacional (PN), asumió la presidencia de la Junta Departamental en noviembre del 2020, en el primer periodo 2020-2021. En ese lapso que ejerció la presidencia, propuso renovar la mobiliaria del órgano legislativo y contó con el visto bueno de los concejales oficialistas y de oposición.
La pasada sesión de la Junta Departamental de Rocha, martes 26 de julio, el curul del MPP, Julio Graña manifestó que sobre “las investigaciones que generan sospecha de irregularidades en compras efectuadas durante la gestión de un edil oficialista, en el cargo de la presidencia, hasta ahora no se habla. […] Continúa sentado en su banca tranquilo. Prometemos ir hasta el final de este desagradable episodio”.
En un principio, la bancada del Frente Amplio (FA) solicitó las boletas de las compras. Sin embargo, la pasada sesión la coalición de izquierdas decidió dar un paso más y presentar un pedido informe que se divide en nueve puntos. En resumen, el documento solicita información de las empresas, requiere documentación sobre el mobiliario adquirido e indaga dónde se encuentran los muebles que fueron retirados.
Desde la oposición, además señalan que a través de ambas compras que suman un total de $1.093.161, se incumple con la ley 19.924 del TOCAF que coloca un tope a las compras directas, por lo que aseguran que fraccionar la compra en dos es una maniobra para esquivar dicha normativa.
¿Qué dice el TOCAF?
En su artículo 33, Literal C, Ley 19.924, el Texto Ordenado de Contabilidad y Administración Financiera (TOCAF) determina que el límite máximo para la compra directa común es de $826.000.
Se gastó de “más” y “por fuera”
Julio Graña, edil por el FA dijo a Diario El Este que “Molina se excedió en esas compras y en vez de traer las cuentas claras”, se gastó “de más” y por “fuera” de lo que permite el TOCAF. “ Hizo la compra por lo que se puede y lo otro lo agregó por fuera”, para “eludir» el paso de la resolución por la Junta Departamental.
El curul frenteamplista aseguró que el nuevo mobiliario es de “inferior calidad” al anterior. “No dudo lo que costó, eso lo va a tener que demostrar Molina”, añadió.
“Hay un montón de irregularidades que puedo nombrar: ¿Quién recibió los muebles? ¿Dónde fue a parar el mobiliario que no se usa más? No se sabe dónde está. Tiene que haber un inventario. ¿Cuándo salieron de acá y cuándo entraron estos? Queremos ver el inventario de la Junta Departamental. Él (Molina) presentó tres ofertas, tres empresas que están siendo investigadas. «Pidió un presupuesto pero no les dijo voy a dividir” la compra, “como teóricamente eran más altas no les compró”, indicó Graña.
En referencia a una posible pre investigadora, para la cual la oposición necesita una mayoría simple, Graña expresó que si les satisface la respuesta quedará en el pedido de informe, por el contrario solicitarán la pre investigadora, “ahí ya tenemos que hablar en otros términos”, consideró.
En ese mismo sentido, agregó: “Quienes estamos haciendo la denuncia somos minoría. Puede trancar la investigación el gobierno, ya trancó una muy importante sobre la Fundación A Ganar”. Sobre esta situación puntual, asintió que en la Junta Departamental “no se hablaba” y “son cosas que la gente tiene que saberlas”.
Movimientos “extraños”
Jaime Píriz, edil frenteamplista en diálogo con Ulmañanas (radio comunitaria de Punta del Diablo) afirmó que la pasada sesión vieron movimientos “extraños” en la Junta Departamental, previo al inicio de la misma.
Cuando la bancada opositora estaba presentando el pedido informe, Píriz apuntó que el intendente Alejo Umpiérrez y Valentín Martínez, secretario general, irrumpieron en sala y “presionaron a la bancada oficialista para que no vayan a votar una investigadora sobre el tema”, acto que calificó de “preocupante”.
“Nadie se llevó nada para su bolsillo”
José Luis Molina dijo estar “desesperado por hablar”, sin embargo desde la bancada oficialista le solicitaron que se “quedara quieto, que esperara”. En cuanto a las compras de muebles para el recinto legislativo, se limitó a remarcar que se siguieron los procesos con total transparencia y no quiso referirse más al tema ya que quiere “cumplir con la palabra que dio” a la interna nacionalista.
El coordinador de bancada del Partido Nacional, Germán Magalhaes, afirmó que toda la información de la compra se encuentra a “disposición”. “No tenemos ningún inconveniente” en votar una pre investigadora, el propio Molina la propuso para dar luz sobre estos hechos. “Nosotros (la bancada oficialista) le pedimos que no lo hiciera, que no se expusiera” y “esperara que corriera por los carriles que habíamos acordado con el FA”, explicó.
A la hora de aludir a su compañero, Magalhaes dijo que hay un político con una carrera de años y que “hoy está en su mejor momento”. En relación a la decisión de que Molina no otorgue declaraciones públicas, argumentó que se debe a que “no se expusiera porque está muy dolido” ya que se encuentra en juego su “honorabilidad”.
“Parto de la base de que no hay corrupción, nadie se llevó nada para su bolsillo”, aclaró, y señaló que el “quid de la cuestión” y lo “discutible” sobre una posible “desprolijidad administrativa” es haber efectuado dos compras en vez de una. A la vez, dejó en claro que se encuentra toda la “trazabilidad de los muebles que estaban y la trazabilidad de los que llegaron, eso es fundamental”.
“Está claro que toda la Junta estuvimos de acuerdo en cambiar el mobiliario, se lo felicitó cuando quedó instalado, todos quedaron contentos y conformes con el trabajo. Nunca hubo una queja de la calidad del producto, ahora es fácil hacer leña del árbol caído. Cuando trasciende a la prensa, hay una necesidad, un reclamo de desprolijidad administrativa, pero es un tema netamente político”, agregó.
Consultado sobre la presencia en sala del intendente y el secretario general, reconoció que pasaron a saludar, “preguntaron” sobre el tema, aunque descartó cualquier tipo de presión hacia los ediles oficialistas. Por último, destacó que el ejecutivo es el mayor interesado en que la situación se esclarezca cuanto antes.
La compra
Según la información a la que accedió Diario El Este, la compra se divide en dos partes. La de menor monto a una empresa local, fue por un sillón ejecutivo por $11.341; 36 sillas por un monto de $234840.24 ($6523.34 c/u); tres sillones ejecutivos con respaldo alto con cabezal por $37804.14 ($12601.38 c/u); 10 sillas giratorias operativas por $57554.10 ($5755.41 c/u); una suma total de $341539.48.
La compra de mayor monto fue de 12 mesas para ediles e invitados por $347998.68 ($28999.89 c/u); seis ángulos conectores por $22572 ($3762 c/u); 10 mesas de trabajo 1200x600mm por $33767.7 ($3376.77 c/u); cuatro archivos medianos cerrados – 1100mm por $26616.90 ($6654.23 c/u); moquette por $137952.54; mano de obra – instalación de moquette en rollo por $47175.48, sumado el incremento de IVA (22%) $135538.33, un total de $751622.
Las ofertas que fueron declinadas al solicitar presupuesto y que están bajo investigación por la oposición, eran por $1.342.184 y $1.409.294.