Me gusta tener en cuenta todos los roles al momento de destacar los logros. Muchas
veces nos quedamos en los jugadores, olivándonos de que atrás está el capitán del barco,
uno de los que ocupa el puesto más importante a la hora de hablar de fútbol. Por eso en
ésta nota quiero resaltar el papel fundamental que juega un Director Técnico dentro de un
equipo.
No se trata solo del “loco” que está afuera, haciendo morisquetas y calentándose cuando
no salen las cosas, es mucho más que eso. Un DT es quien pone la espalda en los
momentos difíciles, quien abre las alas para proteger a sus pichones cuando muchos
buitres se los quieren comer. Es mucho más que una figura táctica, porque a veces toca
sacarse la camiseta de técnico y ponerse la de padre, sobre todo hoy en día, que los
adolescentes y jóvenes son moneda corriente en todos los equipos.
Por eso hoy, éstas líneas son para ellos, para los que dejan la vida no solo en cada partido,
sino que en cada práctica también. Para los que soportan las críticas y muchas veces las
injusticias. Porque la realidad es esa, cuando las papas queman, todos somos técnicos y
sabemos que hacer, pero hay que estar ahí, detrás de la línea punteada, siendo objetivo
de análisis de muchas miradas. A la prueba está que cuando no se dan los resultados, el
primero en marchar es el entrenador. Hasta ahora no comprendo cómo son removidos de
un momento para otro, siendo que a veces, la responsabilidad es de todo el equipo. Jamás
vi irse a un jugador de la noche a la mañana, o mejor dicho si he visto, porque en el fútbol
pude pasar cualquier cosa, dentro y fuera de la cancha, pero es más común ver salir
técnicos en un abrir y cerrar de ojos, que jugadores.
Por eso hoy, buscamos la experiencia y perseverancia, la amabilidad y el respeto, la magia
y la técnica juntas en un nombre: Gerardo Pelusso. Ex jugador y entrenador nacido en
Florida el 25 de febrero de 1954, quien luego de andar a lo largo y ancho del continente
(también fuera, ya que dirigió en Catar) paró su barco en El Este para contarnos sus
experiencias y como se ve todo desde allá arriba, desde la cabina del capitán. Dejemos
hablar a los que saben. Bienvenido Gerardo.
- Primero que nada, queremos saber cómo estás hoy por hoy y a qué te dedicás
“Decidí dejar la dirección técnica y tengo algunas actividades que son las que me
gustan. Trabajo para AUDEF que es mi gremio (Asociación Uruguaya de
Entrenadores de Fútbol), también soy docente en el ITP que es un centro de
estudio que tenemos con la Asociación Uruguaya de entrenadores de fútbol e
integro desde hace muchos años el grupo de estudios técnicos de la CONMEBOL.
Ahora estamos haciendo la observación y en análisis de la Copa América, ya que
somos entrenadores de todas partes de Sud América. Hay dos colombianos, dos
argentinos que son Nery Pumpido y Checho Batista, un brasileño, en fin, somos varios que trabajamos durante y después de la Copa, llevando ese material a todas las Federaciones de América del Sur. Me tiene muy entusiasmado porque es un proyecto que hace mucho tiempo lo venimos trabajando”.
- Dentro de tu rol de DT, sabiendo que es un puesto con presiones de todos lados ¿Cuándo lo empezaste a disfrutar?
“En realidad, siempre lo disfruté, ha sido mi pasión. Si bien es una situación, vista
de afuera, difícil, complicada y con muchas críticas, el que lo siente y el que lo vive
realmente disfruta poder dirigir, poder organizarlo, jugar los partidos y planificar
las actividades. Es una cuestión que está implícita en la dirección técnica de quien
tiene la vocación. He tenido momentos difíciles también y me ha tocado sufrirla”. - ¿Que opinión te merece el VAR? ¿Estás a favor?
“El VAR es una herramienta tecnológica muy importante, fundamentalmente para
darle justicia sobre todo en aquellas jugadas importantes realmente, que para los
jueces es muy difícil y en algunos casos imposibles, poder detectarlas. Faltar falta
mucho, primero que nada, entrenamiento a los propios árbitros que manejan el
VAR y a nosotros en Sud América nos hace falta tecnología. Mas cámaras y mejor
locación. Hay una serie de cosas que faltan que hace que no sea una herramienta
tan efectiva como todos queremos”. - ¿Volverías a Dirigir?
“No, no volvería a dirigir porque ya tomé la decisión, la estuve pensando un
tiempo bastante largo. En el 2017 me tomé un año sabático con muchas ganas de
no dirigir más, y al final me entusiasmaron en Deportivo Cali con un proyecto muy
lindo y retomé. Yo ya conocía Colombia, conocía el club, sabía que es un club
precioso, con una gente maravillosa. Así que me entusiasmé y fui, pero cuando
volví a fines del 2018 ya sabía que ese había sido mi último club. Fue un ciclo
fantástico en mi vida, logré cosas que nunca soñé entonces no tengo nada que
reprocharme ni hay nada que me mueva porque la decisión está completamente
tomada”. - Te agradecemos la disposición y el tiempo. Te deseamos lo mejor en ésta etapa de tu vida.
“Yo les agradezco la invitación, a la gente de Treinta y tres y al diario El Este.
Abrazo grande y ojalá pronto nos podamos ver por ahí. Estoy siempre a las
órdenes”.

Así pasaba Pelusso, que dejó la dirección técnica, pero sigue moviendo los hilos y
promoviendo el fútbol desde otro lugar como es la CONMEBOL. Me quedo con la vocación de servicio, porque no dejó todo y se quedó en su casa haciendo zapping, sino que mediante la docencia, sigue indicándole a muchos jóvenes el camino y su experiencia es un manantial interminable.
También me quedo con una charla personal que tuvimos luego de la nota, en dónde
remarca sus valores y el respeto hacia sus amigos y pares. Me ayudó a refrescar la
memoria y entender que en el periodismo la magia está en mostrar lo lindo del deporte
también, y no tanto la polémica y el fatalismo. Por más de que a veces hace falta un golpe
de realidad y mostrar todas las caras, también es lindo resaltar las enseñanzas y sonrisas
que nos ha dejado por ejemplo, la Selección. Hoy nos quedamos con ese trago amargo de
los empates en las Eliminatorias, pero las lágrimas de emoción cuando Suárez sacó la
pelota con la mano, o cuando el “Loco” la picó, no se borran así nomas. Por éstas
reflexiones, y por seguir representando nuestro fútbol desde otro lugar ¡Gracias Gerardo!
Nota: Belén Silveira