Sabemos que el país centroamericano se encuentra sumergido en la pobreza y el desabastecimiento, formando la mezcla perfecta para que esta tragedia tenga lugar.

El país, desde el pasado mes de octubre viene sufriendo graves problemas con el abastecimiento de combustible. Esta problemática ha impulsado a que mucha gente se vuelque al comercio ilegal de este producto al punto de conseguirlo mediante asaltos para luego revenderlo en el mercado negro.

Fue asi como un centenar de personas se habían acercado al camión cisterna con la idea de saquearlo sin saber del riesgo que corrían. Pues el camión, por motivos que aún se desconoce, explotó dejando un saldo de al menos 50 personas muertas en la ciudad de Cap-Haitien.

“Observé en el lugar entre 50 y 54 personas quemadas vivas. Es imposible identificarlas”, declaró el vicealcalde de la ciudad, Patrick Almonord. Según explicó a medios locales, un centenar de personas estaban tratando de saquear el camión en el momento de la explosión, luego de que el vehículo se accidentó en el céntrico barrio de Pont Grand Bois et Samarie, pasada la medianoche.

«Seguimos con el recuento» de víctimas, había dicho ya antes a la emisora Radio Televisión Caraïbes, subrayando que la cifra de fallecidos es preliminar. Numerosos heridos estaban siendo atendidos en el suelo de un hospital de Cap-Haitien por la falta de camas, según imágenes que circulaban en redes sociales.

Para poner en contexto la problemática actual, debemos de saber que el Gobierno haitiano anunció un fuerte aumento de las tarifas de los derivados de petróleo que alcanzan un 24% en el caso de la gasolina y del 108% para el gas oil.

Esto ha provocado desabastecimiento y que los precios en el mercado negro sean más caros dependiendo de la disponibilidad en las petroleras.

El pasado fin de semana, en Puerto Príncipe se produjo las primeras protestas contra las subidas de precios de los combustibles. En julio de 2018, el anuncio en el aumento del precio de los combustibles causó ya varios días de manifestaciones violentas en las calles y tensiones en Haití que sacudieron las bases de poder del entonces presidente, Jovenel Moises.