Si hay algo que me propuse cuando comencé a escribir para éste diario, fue escribir de todos los deportes y deportistas, y no solo eso, sino que también darles la importancia que se merecen. Por eso para mí es importante conocer de “pé a pá” la vida de Gonzalo Bergessio como la de la Pocha Ávila. No existe para mí diferencia, porque cuando amas el deporte, lo único que podés ver son méritos. También creo que estoy en una etapa de la vida de examen de conciencia, y de ver las cosas de otra manera, sabiendo que los deportistas no son máquinas de satisfacer las necesidades de un país, sino que tienen una historia, una familia y algo más que contar. Sí, son como vos y como yo. Personas que lo que al fin y al cabo lo que buscan es la felicidad, y si de la mano viene el éxito, bienvenido sea.
Hoy vamos a conocer un poquito más sobre la vida de Hernán Álvarez, un pibe que con 22 años de edad salió campeón del básquet uruguayo con Biguá, consiguiendo así pararse en mi estantería de ejemplos a seguir. Otra vez yo hablando de ejemplos y bla bla bla, como seguramente alguno dirá, pero alguien que, con tan corta edad intenta superarse como persona y como deportista, para mí es noticia. Y teniendo en cuenta el mundo en el que vivimos, también es novedad.
Créanme que tendrían que ver mi cara al momento de escribir sobre cada persona que pasa por estas líneas, en éste caso me lleno de admiración porque me pongo a pensar lo que yo estaba haciendo a los 22 años y no me sale más que aplaudir a Hernán.
Si para mí resultó impresionante las definiciones del Campeonato entre Nacional y Biguá, imagínense para Hernán, quien levantó la copa con su equipo luego de 12 años de no conseguirlo. Las emociones y sentimientos se ponen a flor de piel, debes querer abrazar a todo el mundo y seguramente te acordás de toda tu familia, la que está en la tierra y la que festeja con vos desde allá arriba. Pero yo toco de oído, porque lo único que he ganado es algún que otro partido en la Play, mejor escuchemos al protagonista de hoy, Hernán Álvarez.

– ¿Cómo fueron tus primeros pasos en el básquet?
“Se dio desde muy chico, ya que arranque con 3 añosmás o menos. Mi hermano jugaba, yo lo iba a ver y en el entretiempo me metía con mi pelota a tirar. Fue en Goes y luego toda mi vida jugué al básquet, nunca hice otro deporte, aparte de que vengo de una familia muy “basquetbolera”. Mi viejo jugaba y mi tío también, y el barrio ayudó porque es un barrio que le gusta el básquet. Gracias a Dios puedo hoy seguir disfrutando de jugarlo a nivel profesional”.
– ¿Cómo es tu presente hoy en día en el club
“La verdad que muy feliz, disfrutando este momento de haber conseguido un título más para el club. Era un sueño que tenía pendiente, arranque a jugar a los 8 años en Biguá y siempre soñé esto. Hoy por hoy siendo protagonista y poder hacer realidad eso, estoy muy feliz, muy satisfecho y orgulloso. A veces no caigo de que pude conseguir eso, pero bueno, ahora estoy de vacaciones y contento por el logro”.
– ¿Qué sentiste en ese momento que sonó la chicharra y se coronaban Campeones?
“Ese momento fue único, cuando termina el partido, suena la chicharra y sabés que sos campeón se te pasan muchas cosas por la cabeza. Muchos sentimientos, mucha felicidad y orgullo. Faltando 5 minutos para que termine el partido yo ya estaba llorando en el banco porque no aguantaba más los nervios y la ansiedad que tenía. El hecho de que estaba tan cerca de cumplir ese sueño, cuando terminó el partido exploté y fue una mezcla de todo. Mucha felicidad y orgullo, no te podría decir una cosa sola porque me pasaron muchas cosas y lo voy a recordar el resto de mi vida”.
– ¿Qué deportista tenés como ejemplo?
Como referente tengo a varios, a nivel internacional me gusta Facundo Campazzo, intento mirar varios videos de él o partidos, ya que me gusta mucho su estilo de juego. Más acá en Uruguay me gusta mucho Luciano Parodi y el Pepo Vidal, con quien tuve la suerte de compartir plantel este año, es un jugadorazo y más verlo día a día entrenar y liderar al equipo fue algo que me sumó muchísimo para mi carrera y para mi juego”.
– ¿En qué liga te gustaría jugar?
“Me gusta mucho la Liga Argentina, la sigo bastante y en un futuro me gustaría estar ahí. Otra liga que me gusta mucho es la de España que es sumamente competitiva, ojalá que en algún futuro se pueda dar, pero hay que trabajar mucho para eso. Es un sueño también que uno tiene y lucha para que se cumpla”.
– ¿Has pasado por momentos difíciles en tu carrera?
“Como todo deportista siempre tenés momentos duros, de bajón, que no te salen las cosas o tal vez no jugas y no te va bien. Por suerte en esos bajones pude estar bien y obviamente a veces te bajoneas más de la cuenta. Pero por lo general con ayuda de mi psicólogo Jorge, siempre las cosas negativas que me pasaron las pude charlar y nunca caí mas. Pero el deporte es duro y cuando entrás en el profesionalismo, que es todo máscuesta arriba y es difícil encontrar tu lugar o que te den oportunidades, te vienen los bajones porque te chocás con esa realidad. Pero con ayuda de un psicólogo pude salir adelante”.
– ¿Sentís que en Uruguay le damos la importancia que merece al Básquet?
“Yo creo que sí, porque el básquetbol después del fútbol, es el deporte que más se ve en Uruguay. Hablando de la televisación también, y van muchas radios, lo que ayuda que se difunda de buena manera al país. A parte con el nivel de jugadores y de extranjeros que han llegado últimamente, hace que nos vean afuera de otra manera y es muy importante para el crecimiento”.
– ¿Con que sueña Hernán Álvarez?
“Mi sueño hoy en día es poder vivir del basquetbol, poder en un futuro ser profesional 100%. Obviamente después hay otros objetivos como jugar en otras ligas. Pero hoy por hoy sueno con vivir de esto que es lo que más me gusta”.
– ¿De quién te acordás en éstos lindos momentos que pasas?
“Cuando pasan estas cosas de lo primero que te acordás es de la familia y de los amigos. Por suerte mi familia pudo estar en los festejos después del partido cosa que no me esperaba, porque no sabía que iban a venir, pero me puso muy contento”.
– ¿Qué les dirías a esos pibes que intentan llegar y a veces se frustran?
“Les diría que, si quieren ser profesionales, o llegar a jugar en primera va a ser un camino difícil, pero si le meten muchas horas de trabajo y le dedican tiempo y pasión, sumado a la constancia y perseverancia, en algún momento llega la oportunidad. Obviamente no va a ser fácil, va a haber muchas piedras en el camino, pero es ahí donde hay que estar fuertes de cabeza para seguir enfocado en el objetivo y seguir metiéndole. Nunca hay que olvidarse tampoco de disfrutar y de generar amistades. El básquetbol es un deporte que te da muchos valores y hay que tomarlo sin ninguna presión si querés cumplir ese sueño”.

Acostumbrándonos a tener campeones y estrellas que dejan su luz y enseñanza, nos despedimos de Hernán, quien a su corta edad sueña con vivir de lo que le gusta. También aprovecho para agradecerle, porque me demostró que no hay que aferrarse a lo simple y fácil, sino que siempre hay que ir más allá. Acá es cuando me doy cuenta que el “feaserío” trillado como “es lo que hay”, no siempre tiene su lógica, porque siempre hay más, solo que depende de nosotros. Estoy segura de que a Hernán nadie le golpeó la puerta y le dijo ¿che querésjugar en primera? El pibe arrancó con su pelotita, tirando en el entretiempo mientras veía a su hermano, y hoy es Campeón Uruguayo de Básquetbol ¡Tomá pavo’!