El presidente de los Estados Unidos anunció este martes que junto a la primera dama Jill Biden, preveían viajarán el jueves al lugar de la tragedia, que por el momento tiene como saldo 11 muertos y 150 desaparecidos. Más tarde, la Casa Blanca confirmó el viaje
La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, informó que se enviaron a la zona del suceso recursos de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA) y expertos de diversas agencias federales como la Administración de Seguridad y Salud (OSHA) o el FBI trabajan también para ayudar en el rescate y en el análisis de lo ocurrido.
Por su parte, la alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, informó que el número de desaparecidos por el derrumbe se sitúa ahora en 150, mientras que los localizados con vida son 136, además prometió llegar “hasta al fondo” en la investigación para determinar las causas de esta tragedia que alcanzó a personas y familias de diversos países.
Asimismo, destacó el apoyo obtenido en los últimos días, “La respuesta que hemos recibido de socios federales, estatales y de otro tipo durante los últimos seis días no han tenido precedentes, y estoy profundamente agradecida. El Presidente visitará el lugar de esta tragedia para pasar tiempo con las familias afectadas y los socorristas”.
Al tiempo que, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, dijo que «los equipos de rescate de Florida y del extranjero han trabajado sin descanso para buscar señales de vida entre los escombros, pero el panorama es cada vez más sombrío, ya que nadie ha salido con vida de los escombros». “La búsqueda continúa, y no se detendrá hasta que haya una resolución”, puntualizó.