La serie de HBO protagonizada y producida por Zendaya tomó el caso de un joven israelí que fue asesinado.
Zendaya caracterizada como Rue.Redes sociales.
Los domingos a la noche las redes sociales explotan ante el estreno de un nuevo capítulo de Euphoria, la serie protagonizada y producida por Zendaya que muestra con crudeza la vida de un grupo de adolescente, su vínculo con las drogas, la exploración de la sexualidad, sus vínculos y la ausencia de los adultos en situaciones complicadas.
Para crear este proyecto en sociedad con HBO, Sam Levinson tomó algunas cuestiones de su vida privada. De hecho, más allá de que se basó en una producción israelí llamada Ophoria, reveló que partió de sus experiencias de su juventud, en relación con el consumo de drogas y los excesos. Pero además, hay una historia real detrás de la violencia que el público encuentra en la pantalla.
Si bien no fue tomada de manera explícita, personajes agresivos como Nate Jacobs, interpretado por Jacob Elordi, o el dealer Fezco, a quien le da vida Angus Cloud, o los arrebatos que tiene Maddy, el papel de Alexa Demie, tiene como origen una tragedia que tuvo lugar en Israel en 2004. En diciembre de aquel año, Raanan Levy, de 18 años, salió a bailar con sus amigos por insistencia de sus padres.
Según The Jerusalem Post, al llegar al boliche no lo dejaron ingresar y se quedó hablando con una mujer en la calle. El novio de ella pensó que estaban coqueteando y esperó a Raanan se fuera para perseguirlo con su camioneta y herirlo con un arma blanca hasta provocarle la muerte. Y semejante acto de violencia mantuvo a todo el país en vilo.