Diario El Este

Las juveniles Adriana Castillo y Romina González cuentan cómo fue su experiencia en la carrera Doble San Antonio – Diario El Este

Las juveniles Adriana Castillo y Romina González cuentan cómo fue su experiencia en la carrera Doble San Antonio

Nuevamente tenemos noticias que celebrar y difundir, ya que el Club Atlético Olimar y el FOAM (Federación Olimareña de Atletismo Máster) dejaron nuestro querido pueblo, una vez más bien representado. 

El pasado 12 de febrero se corrió la tradicional carrera organizada por la Intendencia de Maldonado “Doble San Antonio”, donde las distancias a recorrer eran de 4 u 8 kilómetros, acorde a la capacidad de cada participante. Cada vez son máslos jóvenes de nuestro pueblo que se animan a agarrarle el gustito al atletismo, siendo eso algo muy bueno y que no da margen a los malos hábitos que azotan nuestro pueblo, atreviéndome a afirmar esto con total propiedad. Por esto y por mucho más, seguiré difundiendo las noticias de gurises que se animan a hacer algo diferente, a adaptar el deporte en como un estilo de vida y a los referentes de las instituciones y compañeros, como una segunda familia. Créanme que se me eriza la piel cuando escucho que alguien es de Treinta y Tres en competencias donde hay atletas y gurises que se preparan todo el año para esas instancias. 

En fin, creo que con estas palabras le respondí a la persona que me escribió por privado porque “no le daba más bola al fútbol o a la Selección Departamental”, partiendo de la base de que claramente no lee mis notas, sin ir más lejos podemos conseguir el ejemplar del lunes, donde conversamos con los DT de la mayor y de la sub 17. 

Aclarado esto, no quiero desviar más el foco y presentarles a una de las protagonistas de nuestra nota de hoy. Su nombre es Adriana Castillo, tiene 16 años y nos representó en la categoría 4k damas, obteniendo el lugar 18 de 112 competidoras, dentro de su categoría. Adriana siempre tuvo una especie de atracción por el deporte, sin esperarse que más adelante se iba a ver involucrada en algo tan lindo y especial como el atletismo. Así fueron sus primeros pasos: “El atletismo siempre me llamó la atención de tal manera que estaba pendiente de mirar carreras por YouTube o por donde fuese. Con el entrenamiento comencé hace un mes y medio cuando vino una amiga a mi casa y me comentó que tenía que irse a entrenar. Eso despertó mi curiosidad y le pregunté, a lo que me respondió que ella estaba en un club de atletismo. Ahí me invito a ir y desde ese entonces entreno con un grupo maravilloso. Desde ese momento se me despertaron las ganas de ir a competir y a entrenar a tal punto que no voy un día me siento mal. Desde ahora quiero seguir entrenando y superarme a mí misma”

Los Juegos Olímpicos nos dejaron varias cosas, entre ellas referencias de atletas como María Pía Fernández, quien a pesar de no haber podido competir como ella lo esperaba, nos dio a todos una lección de perseverancia y auto superación, convirtiéndose así en un ejemplo para nuestra joven entrevistada de hoy: “Admiro a María Pía Fernández, a quien tuve el placer de ver correr y sacarme una foto con ella. Creo que para todas las corredoras es un ejemplo a seguir, una genia en lo que hace. Otro referente que tengo es Marcos Silva, mi entrenador a quien no tengo palabras para describir la admiración que siento hacia él”.

Con respecto a su debut en la Doble San Antonio, Adriana nos confesó que sintió una mezcla de sentimientos al momento de correr, con muchos nervios, miedo y a la vez esa felicidad que da alcanzar los objetivos y estar en el lugar que anhelaba: “Como era mi primera carrera no sabía que podía llegar a pasar. Unos días antes ya estaba nerviosa, no sabía dónde me iba a meter ni donde me iba a esconder, pero la verdad que valió la pena. Cuando estaba por largar lo único que se me pasaba por la mente era que tenía que llegar, siendo lo que a fin de cuentas sucedió. Fue una experiencia inolvidable porque cuando llegué quería seguir corriendo por la adrenalina que tenía”. 

Y como en todo logro, siempre tenemos presentes a esas personas que no nos sueltan la mano, Adriana no se olvidó de tenerlos consigo, tanto en la carrera como en esta nota: “Quiero agradecer a mis padres que siempre estuvieron presentes, a Romina González, a Marcos Silva que siempre me apoyó y me dio para adelante. No me quiero olvidar de mi segundo entrenador, Nicolás Machado que ahora me entrena aparte y siempre está muy presente “. 

Por otro lado, tenemos a Romina González de 15 años, quien también tuvo la experiencia de ser debutante en una carrera tan importante. Conversó con nosotros y nos contó cómo se le cruzó el deporte en su vida: “Primero comenzó mi hermano y yo lo acompañaba, lo que hizo que me empiece a gustar y decidí entrenar, me prendí al grupo y me gustó. Lo de ésta carrera fue de un día para otro, porque Marcos ya nos había dicho que íbamos a tener una prueba de estado. En ese momento junto a otra compañera nos pusimos las pilas para poder pasar esa prueba. El día mismo de la prueba estaba muy nerviosa y me sentí mal lo que hizo que no pueda hacerla, pero dos días después Marcos me dijo que me había ganado la ida a la San Antonio. Lloré de felicidad porque recibir una noticia así de la nada, es una de las cosas más lindas del mundo”. 

Así vivió la carrera Romina, con esos nervios hermosos que se sienten cuando sabemos que vamos por buen camino y que tanto tiempo de entrenamiento, no es en vano: “Antes de comenzar la carrera me mandaron a cambiarme y estaba templando de los nervios, hasta me puse a llorar antes. Cuando me paré en la línea de largada tenía tremenda cara de susto, pero cuando empecé a correr me sentí liberada. Fue la experiencia más linda del mundo. al llegar a la meta volví a llorar abrazándome con todos mis compañeros, siendo una de las experiencias más lindas de mi vida”.

Romina se ubicó en el puesto número 11 de 113 atletas de su categoría, lo que hace que tal logro, tenga nombres propios, esos que nunca le soltaron la mano y siempre la han acompañado: “Quiero agradecer a Sebastián Aquino, Marcos Silva, Marta Ramos, Kevin Gadea, Nicolás Machado y a Adriana Castillo. También quiero agradecerle a todo el grupo CAO, que es lo más lindo que existe poder entrenar con ellos”.