El lugar abrió en 1995 y se convirtió en uno de los sitios más convocantes para los artistas regionales e internacionales, de la mano del productor Leandro Quiroga
PUNTA DEL ESTE (Enviada especial).- Leandro Quiroga tenía 18 años cuando la idea lo abrazó. Corría el mes de diciembre de 1995 y el entonces joven estudiante de música le propuso a su familia ser anfitriona de un íntimo concierto de música. “La idea era abrir un boliche de playa que nos permitiera tener nuestros propios ingresos”, explica. Una semana después, Medio y Medio abrió sus puertas y, 27 años más tarde, se consolidó como un templo de artistas que combina la música y la gastronomía en el Este.
Una vez que la bola empezó a rodar, no paró. Testimonio de los años con artistas de talla internacional decoran las paredes. El vestuario está empapelado con listas de repertorios de los músicos que han pasado por el lugar. De Luis Alberto Spinetta a Jaime Ross, cada temporada desde hace casi tres décadas se abre paso a noches de íntima conexión entre artista y audiencia.
“Durante los dos primeros años se fue armando”, recuerda Quiroga, en una charla con LA NACION. Todo comenzó, según Quiroga, paso a paso. Al momento de la creación de Medio y Medio, el empresario y productor era un estudiante de música con algunos contactos. “Empecé en base a relaciones”, asegura, y explica: “En el destino no había mucha competencia en la zona, solo un festival de jazz que nació en simultáneo, pero era muy estricto al género. Entonces éramos un espacio que para un montón de artistas de calidad no había otro lugar donde los cuidaran y les hicieran esta propuesta”.
Graciela Ferreres, la madre de Quiroga, fue otra de las claves en el proyecto. “Cada vez que hacíamos un concierto, mi madre hacía un plato diferente”, explica. Así se instaló la fusión de gastronomía y música, que le dio un mote particular a la propuesta. “Eso es uno de los tantos motores para que los artistas vengan acá, porque ellos saben que comen riquísimo”, considera.”Mi madre creó la gastronomía en Medio y Medio, y cocinó hasta hace dos años -detalla Quiroga-. Hoy todas las personas que trabajan en la cocina son sus discípulas, con la misma carta. El plato de spaghetti y mejillones que se sirvió el día de la inauguración, el 21 de diciembre de 1995, sigue exactamente igual, con la misma receta”.
El crecimiento del proyecto en Punta Ballena se dio en simultáneo con el lanzamiento de la productora de Quiroga en la Argentina. “Con los años también fui creciendo en diferentes partes de Hispanoamérica, entonces muchos artistas fueron recomendándose unos a otros”, señala.
No solo artistas de las dos orillas han pasado por Medio y Medio. Al repertorio de pesos pesados como Charly García, Zorrito Von Quintiero, Fito Páez, Rubén Rada, Jaime Ross, Jorge Drexler, Skay se han sumado otros nombres de aquí, de allá y de muchas partes. Como los brasileños Chico César y Paulinho Moska; los españoles Kike Veneno y Albert Pla y la mexicana Julieta Venegas. La lista sigue y sigue y aumenta cada verano.
“Si bien ya hacíamos conciertos afuera, en 2007 inauguramos el escenario al aire libre con toda la estructura de madera y plantas”, afirma Quiroga y recuerda: “Lo inauguró Luis Alberto Spinetta, que vino varias veces a la casa”.
En la actualidad y ya desde hace años, el festival de Medio y Medio comprende entre 35 y 40 conciertos en un plazo de 60 días, con una cartelera de un espíritu muy ecléctico, según define Quiroga. “La idea es poder mostrar diversos estilos, en diversos formatos, en diferentes tímbricas, pero todo unido por la calidad musical”, señala el productor y subraya: “Traemos los proyectos más destacados en sus nichos, sean artistas que vienen de tocar en un estadio de 50 mil personas o artistas que vienen de tocar en un club de jazz”.
El reloj marca minutos pasadas las 22. Es viernes por la noche en la temporada alta de Punta del Este y la gente comienza a colmar el anfiteatro bajo un cielo repleto de estrellas. Suena la banda platense Cruzando el Charco con su rock criollo y festivo, que hace bailar a medio millar de personas. “Todas las noches es así”, afirma Quiroga con una sonrisa inmensa, mientras se pasea con un handy de lado a lado para garantizar que todo salga según lo planeado.
“Hoy día es una sala de mucho prestigio donde –por suerte para nosotros- los artistas quieren venir, porque durante muchos años han sido muy cuidados y porque han pasado una enorme cantidad de artistas de mucho prestigio”, señala Quiroga y concluye: “Y la sala se prestigia, como cualquier otra en el mundo, por la mística de los artistas que han pasado por el lugar”.
Fuente diario LA NACION: «https://www.lanacion.com.ar/espectaculos/medio-y-medio-el-templo-de-la-musica-en-el-este-en-manos-de-un-argentino-instalado-en-punta-ballena-nid17012023/«