Por línea privada, El Este se contactó con una cubana que narró la dramática situación que se vive a estas horas en ese país.

Luego de 62 años de instalado el régimen, la población cubana salió masivamente a las calles, agobiados por la falta de alimentos y medicina, agravado con la emergencia sanitaria provocada por el Covid-19, para lo cual no sólo no hay vacunas, sino tampoco atención médica.

Si bien la situación se arrastra desde hace largo tiempo, desde hace cuatro días, las movilizaciones contra el Gobierno se han transformado en históricas.

Los primeros días se mantuvo circunscriptas al propio territorio, pero la tecnología permitió que en las últimas horas se difundieran videos donde se puede apreciar el caos.

Debido a eso, el Presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, resolvió cortar Internet, evitando de este modo, que se difundan las imágenes de lo que efectivamente sucede en su país.

Pese a ello, El Este logró contactarse con Jacqueline Duanes, una joven cubana quien suplicó por ayuda a nivel internacional.

“Está muy fuerte todo en Cuba;  es una situación muy difícil. Las Naciones Unidas tienen que apoyarnos porque en Santiago de Cuba tenemos cinco personas muertas ya. El gobierno le está tirando a la población”, señaló en medio de la angustia.

La joven indicó que desde el gobierno se está provocando para exista un enfrentamiento.

“El Presidente de Cuba ha mandado a que se enfrente el pueblo; los pocos comunistas que quedan, con la mayoría de la población. El Presidente está invocando a un genocidio” sentenció.

Jacqueline explicó, que si bien se viene atravesando un complejo panorama, todo se profundizó en los últimos meses.

“La situación de Cuba lleva años siendo horrible; y ahora, con este problema del Covid se ha agudizado, pero ellos no hacen nada por el pueblo. El país está afrontando pésimas condiciones. Quienes viven fuera deben mandar hasta el pan para sus familiares, además de medicamentos y otros insumos de primera necesidad”.

Más allá de que recién se tuvo conocimiento de la manifestación social en las últimas horas, ya son cuatro los días en que se inició la movilización.

“Este despertar comenzó hace cuatro días, porque la gente no da más; está muriendo. Los hospitales dan asco, los pacientes todos sucios. Personalmente he perdido una familia, recientemente un primo, que se encontraba internado en un centro de aislamiento, y lo peor de todo es que tienes que llevar los medicamentos. Tienen que entender que la gente está muriendo en Cuba, que lo que ellos dicen al mundo, es todo es una mentira”.

La joven manifestó su frustración con lo que se divulga por la prensa internacional. “En otros países las noticias dicen que el pueblo respalda al Gobierno, pero como cubana te puedo asegurar, que son contados quienes están con ellos, porque están enchufados. Del 100 por ciento de los cubanos, sólo un 20 por ciento estará con el Gobierno.  Lo que está viviendo Cuba es una crisis humanitaria y sanitaria. El maltrato contra la gente es inhumano, terrible”.

En su diálogo con El Este, indicó que “quienes viven fuera de Cuba tienen que mandar dinero, abrigo, alimentos. Imagina que han hecho unas tiendas para comprar solo en euros, en dólares y allí compran quienes, sus familiares en otros países, les colocan en las tarjetas, porque como el dinero no se puede retirar, compran para evitar morirse de hambre. Pero la gente común, la mayoría,  en esas tiendas no puede comprar y se está muriendo de hambre”.

Acerca de la situación política, Jacqueline refiere a la dictadura que se vive desde 1958.  “En Cuba, desde hace 62 años no hay elecciones. En nuestro país, cuando triunfó la revolución, en el 69’; ellos quitaron las elecciones libres. Cuba es una dictadura y el mundo no mira para Cuba, no mira lo que se padece. Cuba es una mentira; aquí no funciona nada. Mi familia está aterrorizada, pero aterrorizada por lo que están viviendo, ya no hay miedo a enfrentarse a los dictadores”.

Consultada al respecto de la represión, la cubana indicó: “Mi país está lleno de presos políticos y ellos dicen que no hay. Pero aún así, ya no hay miedo. Necesitamos el apoyo internacional, pero primeramente, una intervención humanitaria, porque la crisis sanitaria es terrible. Lo de ellos es una mentira. Le dicen al mundo que estamos recibiendo vacunas, pero aquí no hay ninguna vacuna, no hay medicina, no hay nada. Igual mentira que el bloqueo; porque Cuba compra productos a los Estados Unidos. ¿Dónde está el bloqueo cuando se comercializa con quienes dicen que lo bloquea?”.

En las antípodas de las bases del comunismo que se pregona, Jacqueline asegura que “Los gobernantes se han enriquecido a costa de hambrear al pueblo. Todas las divisas que ingresan al país son utilizadas por quienes gobiernan y a la gente, les dan unas migajas insignificantes con las que ni siquiera se sobrevive. Pero además, sus familiares, sus allegados, viven en condiciones de riqueza, nada que ver con el resto de la sociedad cubana. En Cuba hay una élite que desde 62 años se ha enriquecido mientras el pueblo pasa hambre”.

En un impactante testimonio, la joven confesó que la gente vende su propia sangre, su propio plasma, para que el Gobierno lo venda al exterior.  “Cuba comercializa tabaco, ron, langostas y otros frutos del mar, frutas, y hasta el plasma que la gente dona; así como lo escuchas, la gente dona su plasma y luego el gobierno lo vende al extranjero”.

Frustrad por nuestra entrevista, en la cual consultábamos sobre la realidad en su país, tan obvia para ella, Jacqueline no pudo esconder su angustia; “Yo no sé, en tu país, que visión tienen de Cuba; pero aquí se ha llegado a un límite; ya no se tiene miedo. Es la primera vez en 62 años que la gente se tiró a las calles exigiendo vivir, tan simple y necesario como eso, vivir. Han jugado tanto con el pueblo, lo han pisoteado tanto, que el pueblo despertó.  El Presidente salió y dijo que las calles eran de los revolucionarios y que los revolucionarios deben defenderlas, puedes verlo en su twitter, el hijo de la gran puta  lo ha dicho literalmente.  Ha enviado a sus fuerzas a reprimir, y ya tenemos cinco muertos. Están incitando a un genocidio. Fíjate que la gente en Cuba no tiene armas, está desarmada, pero está fajada contra el gobierno con su pecho, con su cuerpo y su dignidad”.

Consultada al respecto de aquello que sería necesario para salir de esta situación, señaló “Nosotros necesitamos ayuda, porque esto lo está generando el pueblo, en solitario; los opositores están todos presos. Esto comenzó cuando la gente comenzó a solicitar intervención humanitaria y el Presidente salió diciendo que necesita dinero; que quienes vivan fuera del país manden divisas. Ya duele mucho. ¿Hasta cuándo?!” indicó.

En cuanto al panorama general, Jacqueline agregó que “la gente está muriendo de hambre, enfermos sin medicina, los enfermos mentales, esquizofrénicos que corren de los hospitales porque no hay atención para ellos, andan en las calles, abrumados, asesinando compatriotas, los suicidios se cuentan en masa; la gente no aguanta más. No hay insumos, no hay médicos, no hay nada. No sé si sabes la historia de los médicos en Cuba, Son esclavos; los envían a otros países, en arreglos que hacen con otras naciones, donde se quedan con el 80 por ciento de su sueldo. Aquí no tenemos nada, ni camas, ni respiradores, ni profesionales; es ciertamente un caos”.

Finalizando nuestra entrevista, la joven mantiene sus expectativas cifradas en que sea el comienzo del fin de una era que ha traído aparejado múltiples adversidades. “Aquí ha comenzado nuestra esperanza, que dure 5 días, 3 meses, seis años, pero comenzó la lucha”.