Un pequeño lugar verde dentro de la Ciudad de Punta del Este.
Es uno de los tantos lugares para visitar estos días frescos y pasar una tarde en contacto con la naturaleza. Podrán respirar aire puro, oír el cantar de las aves que habitan esos enormes árboles y oír el tímido sonido de un pequeño caudal de agua dulce que recorre aproximadamente unos 800 metros antes de desembocar en la playa.
Si bien la caminata no sería muy larga, cuenta con un amplio espacio para la dispersión.
Valor histórico.
Su valor histórico, obviamente se debe al agua. Ese pequeño caudal de apenas 800 metros ha sido motivo de disputas entre los primeros navegantes.
Desde esos primeros exploradores que llegaron a nuestras costas desde Solís, hasta quienes lo sucedieron, recalaban en la zona en búsqueda de agua dulce.