Abuso de funciones, peculado y violencia privada son algunas de las contravenciones que se le acusan.

El caso, que ha conmocionado a la sociedad de aquel Departamento, pero que no sorprendió a abogados jurisdiccionales, quienes tiempo atrás,  desde el Colegio de Abogados, habían presentado una denuncia contra la magistrada  por no dictar sentencias o retrasar expedientes en el despacho, llegó a la instancia de formalización.

La fiscal que entiende en la causa, Dra. Stella Alciaturi, solicitó al Juez  Letrado de Rivera de 1º Turno, Dr. Marcos André Silveyra, medidas cautelares, considerando que puede existir oportunidad de entorpecimiento de la investigación, y en tal sentido, evitar que suceda.

Cabe señalar, que la pareja de la imputada, con quien la magistrada mantenía una relación de convivencia, se encuentra en prisión.

María Noelia Sánchez, quien ejercía como Jueza letrada de 6º turno en Rivera, fue imputada, por los delitos de reiterados abusos de funciones, un delito de peculado y un delito de violencia privada. En todos los casos, en régimen de reiteración real.

En el portal de la Suprema Corte de Justicia, se informa que el Juez Letrado de Rivera de 1º Turno, Dr. Marcos André Silveyra, formalizó la investigación por los delitos de violencia privada, peculado y reiterados delitos de abuso de funciones, que involucran a la Jueza Letrada de Rivera de 6º Turno, a quien la Suprema Corte de Justicia ya había suspendido en el ejercicio de su cargo en el pasado mes de abril”.

Según se detalla en la comunicación oficial, la Fiscalía señaló que “la magistrada habría hecho uso de su investidura para coaccionar a víctimas de delito para que no denunciaran lo ocurrido, se habría negado a entregar equipamiento informático del Poder Judicial que le fue requerido, y habría pretendido coaccionar a funcionarios de inferior jerarquía para que no refirieran hechos delictivos de los que habían tomado conocimiento”.

Entre tanto transcurren 120 días para proseguir con la investigación, previo a la eventual condena, el Juez Silveyra, impuso a la encausada distintas medidas cautelares que implican, la obligatoriedad de fijar domicilio, la prohibición de salir del país sin autorización previa, la retención de sus documentos de viaje y la prohibición de acercarse o comunicarse, por cualquier vía o medio, con cinco personas vinculadas al caso, algunas en calidad de víctimas y otras de testigos.

También se informa que la defensa de la imputada apeló la decisión del Juez Silveyra.

En el mes de abril pasado, también en su portal oficial, la Suprema Corte de Justicia, había informado del inicio de un procedimiento disciplinario contra la Jueza María Noelia Sánchez, quien fuera suspendida del cargo, reteniéndosele la mitad de su salario por un período de seis meses.

En la ocasión se conoció, además que algunos equipos informáticos del juzgado letrado de Rivera habían sido adulterados, con el robo de tarjetas de memoria o discos duros que contenían información valiosa de la Sede.

Fue en ese momento que se pudo vincular a la magistrada imputada, cuando se acusó a un hombre de iniciales H.G.B.A, dado que había quedado registrado en las cámaras de seguridad del Ministerio del Interior, donde se le ve ingresando con llave a la sede penal.

Allanamiento mediante, se recuperaron elementos robados del Juzgado y el teléfono celular de la magistrada, dado que convivía con el  acusado.

Reunidos estos elementos de prueba, se consideró que la denuncia presentada por el Colegio de abogados de Rivera, donde se referían a dilaciones u omisiones de trámite, tenían su causa en la incidencia deliberada de la Jueza, en incumplimiento con sus obligaciones como magistrada.

 El concubino de la imputada permanece recluido en dependencias del Instituto Nacional de Rehabilitación, al tiempo que se habrá de y solicitar una audiencia para ampliar el objeto de la formalización inicial.