Un video que se viralizó rápidamente fue motivo de especulaciones y sospechas de imparcialidad
Apenas pasado el mediodía de este miércoles 8 de diciembre, la noticia circuló rápidamente; se habían alcanzado las voluntades necesarias para llevar adelante un referéndum que pusiera a consideración ciudadana los 135 artículos de la Ley de Urgente Consideración que se cuestionan en el documento aprobado, mayormente por todos los partidos políticos.
Alrededor de 720.000 mil firmas fueron presentadas en el mes de julio ante la Corte Electoral para que fueran verificadas por los funcionarios que se asignaron a la tarea.
El PIT CNT, conjuntamente con el Frente Amplio, fueron los responsables de acercar las decenas de cajas conteniendo las papeletas, que además de los datos personales y firmas de todos aquellos que promovían la consulta popular, también contenía la huella estampada en los pliegos presentados.
De este modo, las autoridades de la Corte Electoral, decidieron centralizar en Montevideo, la función que cumplirían los trabajadores del organismo, quienes fueron designados por su filiación política, en parejas, de modo tal que existiese en cada grupo el contralor partidario correspondiente.
La Corte Electoral es el único organismo al cual se debe ingresar expresando el partido político al cual se representa, precisamente, con el objetivo de dar absoluta transparencia a cada acción que se cumpla dentro del mismo y se garantice la cristalinidad en la labor como aval democrático.
Es decir, en cada una de las oficinas de la Corte Electoral, y sus Oficinas Electorales Departamentales, deben existir funcionarios de al menos dos partidos políticos distintos.
A modo de ejemplo, hasta el acto más mínimo y rutinario, como el relevamiento de locales previo a cualquier elección, para verificar donde se habrá de disponer las mesas para la CRV (Comisión Receptora de Votos), si es necesario cubrir ventanas para evitar que el elector pueda ser observado, o la accesibilidad a los mismos, se cumple con al menos una pareja de funcionarios que responda a dos partidos, lo cual se denomina “contralor partidario”.
En el caso de este tipo de instancias, como la cumplida en el edificio central de la Corte Electoral, validando o rechazando papeletas, el trabajo contó de igual modo, con este contralor partidario; un funcionario de filiación blanca con uno del Frente Amplio; o un colorado con un frenteamplista, etc. En todas las mesas, se dispuso este método de trabajo.
La labor no solamente fue tediosa, minuciosa y de extremo análisis, sino que, por otra parte, obligó a la Corte Electoral a extender el horario laboral de sus funcionarios, debido a los tiempos en que constitucionalmente debía completarse la misma.
Esto llevó, a que los electorales vieran su horario corriente, incrementado en dos horas, sin que esto representara un incremento en sus salarios; no cobraron horas extras.
La medida se toma luego de un acuerdo de hace varios años, firmado entre el organismo y la Federación de Funcionarios Electorales, quienes luego de reclamar un múltiples ocasiones un aumento salarial, dado que se trata de los sueldos más bajos de toda la administración pública, accedieron a la propuesta de los Ministros; se les adjudicaría una partida por sobre el salario, pero en contrapartida, el trabajador no podría reclamar ni un solo centavo en caso de tener que se extendiera su horario.
El convenio fue polémico, y no todos los electorales se sumaron al mismo, pero quienes sí, están comprendidos en lo que se denomina “nuevo sistema retributivo”, se encuentran supeditados a los horarios que la Corte Electoral establezca, sin derecho a reclamo.
De esta manera, cuando en cualquier elección, la labor se extiende hasta las 3.00 o 4.00 de la madrugada, esas horas no son pagas de manera extra, así como tampoco, todos los meses que los funcionarios vieron incrementada su jornada laboral mientras cotejaban las firmas.
Ese fue el motivo por el cual, al ingresarse la última firma requerida para convocar a referéndum, todos los integrantes de los equipos de cotejo, celebraron del mismo modo, dado que se culminaba una labor de más de cinco meses, y no solamente regresarían a su horario habitual, sino a sus oficinas respectivas.
El festejo suele darse como modo, además, de reconocer la labor del grupo, sin divisas partidarias.
Lo mismo sucede en cada fin de escrutinio, sea quien sea el Partido que ha obtenido la mayor votación, o tal como ocurrió con las firmas reunidas por el Dr. Jorge Larrañaga para llevar a plebiscito una reforma constitucional, lo cual requirió horas de más trabajadas sin salario adicional y un intenso trabajo.
Las imágenes tomadas en el video, fueron captadas por un delegado pro referéndum, que tienen permitido el acceso al recinto, así como lo tienen quienes se oponen a la derogación de los artículos.
La labor de los delegados se restringe a observar el trabajo de los funcionarios, pero están impedidos de tener injerencia alguna en la labor, pudiendo únicamente, elevar un reclamo ante las jerarquías a cargo, también con contralor partidario, para que se revea determinado cotejo, donde mantuvo sus dudas por la eventual anulación o validación.
A modo de clarificar aún más las dudas surgidas, quienes se encuentran luciendo camisetas con el Sí, no son funcionarios de la Corte Electoral, dado que existe un concepto básico, que indica, que más allá de que todos saben a qué filiación partidaria corresponde cada funcionario, no está permitido lucir distintivos proselitistas, ni en la indumentaria, ni siquiera un adhesivo en los termos o materas, que suelen ser cubiertos dentro del recinto electoral.
6 comentarios en “¿Qué celebraban los funcionarios electorales al término de verificación de firmas contra la LUC?”
Deja son cualquiera
¡Por supuesto!!! Les caracteriza la hidalguía y el profesionalismo…😏
Basta recordar un llamado a ocupar cargos en la Corte Electoral donde en la publicación de los requisitos uno de ellos era la recomendación escrita del comité de base y la enorme cantidad de «errores» cometidos en el escrutinio de Noviembre 2019 donde en infinita cantidad de ocasiones «sin mala intención» se invertían las cifras de los votos adjudicado al fa los votos de otros partidos y mil irregularidades más (al mejor estilo Maduro) que hicieron necesaria la revisión parcial de lo escrutado. Se dió por finalizada con la mínima corrección de «errores» que devolvieron a la coalición parte de los votos que les habían sustraído determinado el verdadero triunfador electoral…
Después que hagan una depuración de los funcionarios ingresados durante «esos quince años» tal vez sea creíble este relato de «cómo debería ser» porque ¿Hoy? 🙄 ¡Ja!!!
Cuando vi ese video pensé que se justificarían diciendo: «Celebramos el triunfo de la Democracia» y al menos, hubiera sido una mentira más inteligente que la pretendida «Honestidad, imparcialidad, etc.»
Funcionar de esa manera sólo debe que ser «El recuerdo de lo que en otros tiempos fue» 🤷🏻
Muy bien expresada la reseña, aunque siempre están los que busquen la quinta pata al gato. El festejo por labor cumplida, es tal cual. Y lo era aún cuando se pagaban horas extras.
Excelente
Cómo somos tan inocentes el 5 de enero dejemos los zapatitos para los reyes magos. 🤣
Correctamente expresado. Siempre celebramos ante la culminacion de una tarea importante. Primero somos funcionarios electorales cumpliendo nuestra tarea cívica, luego somos funcionarios con filiación partidaria haciendo la tarea de contralor. Basta ver en cada acto que actuamos los electorales para darse cuenta que siempre todo es transparente y justo.