Por Héctor Cavallero
Seguramente el lector se preguntará qué hace este tipo escribiendo.
Es un idea que se le ocurrió a mi amigo el Negrito Gonzalez Oro.
Le gustó que pudiéramos contar algunas anécdotas de los éxitos y fracasos de la larga carrera que recorrí como productor de espectáculos.
Las únicas cosas que escribí antes de esta ,las publicó Landru en la revista Tia Vicenta, a mis 19 años,siendo yo su pseudo corresponsal en Uruguay de la Temporada de Punta del Este.
Hoy viendo una nota en Clarin de Luciano Pavarotti, recordé algo que sucedió que me lleno de satisfacción y que muestra la dimensión del tenor y la generosidad con que desarrollo su carrera ese irrepetible artista.
En 1994 volví a tomar contacto con su representante Tibor Rudas ( personaje desagradable si los hubo en este negocio ) y contratamos a Luciano para presentarlo en Buenos Aires el 15 de Febrero de 1995 en un lugar nunca utilizado antes para espectáculos; el Campo Argentino de Polo.
Su presencia en el país hizo que Menem; gran cholulo ;quisiera conocerlo.
Nos invitaron a un almuerzo en Olivos y allá fuimos con el artista ,su secretaria ( después su esposa )Nicoletta, Valeria Lynch y yo a almorzar con el presidente y su hija Zulemita.
Reunión complicada ,porque ;como mi apellido lo indica; era el único que hablaba italiano.
Por ese motivo el dialogo se hizo casi excluyente entre Luciano y yo.
Me contó cómo promocionaba el desarrollo de cantantes líricos en el mundo y que hacía un festival de competencia internacional con jóvenes postulantes con calidades y deseos de triunfar en esa difícil carrera.
Recordé en ese momento a una extraordinaria cantante lírica que habíamos contratado en algunos recitales de Valeria y le hice el comentario de la calidad de esa joven intérprete Mendocina.
Después de un rato de compartir la rica comida y tratar que los anfitriones pudieran comunicarse con el invitado, Luciano me vuelve a preguntar por la soprano de la que le había hablado.
Le digo que se llama Fabiana Bravo, que tiene unos 25 años y que vive en Mendoza.
Me insiste en que quiere conocerla.
Le pregunto porque el interés ,si nunca la escucho y me responde “Perche me fido de lo che mi ai detto” ( habló italiano ,pero no aprendí a escribirlo )traducido :confío en lo que me dijiste.
Creyendo que estaba en Mendoza,
me comprometo a buscarla e intentar que se ponga en contacto.
Llegué a mi casa y por esas cosas mágicas ,suena el teléfono y era Fabiana Bravo, estaba en Capital.
Cuando le cuento lo sucedido casi se desmaya en la cabina desde donde me llamaba.
Le pido que busque a su profesora y mientras tanto yo me comunicaba con Luciano.
Lo llamo y me pide que la cantante vaya al Sheraton esa misma tarde, que la espera.
Le transmito a Fabiana lo pedido y se presenta a verlo en el Hotel.
Luciano la escucha le da indicaciones del repertorio sobre el que debe trabajar y la invita a que vaya a Modena al mes siguiente a tomar clases con el, para presentarse en el festival de Filadelfia.
Surgía un problema, si bien le darían el lugar para vivir, la invitación no incluía el pasaje a Italia.
Con otro empresario , Levitt,dueño del Teatro Blanca Podesta,que la conocía y la había presentado en el espectáculo “Broadway” le organizamos una actuación a realizarse en el Teatro ,donde recaudamos una pequeña parte del costo del pasaje y algo de dinero para su estadía.
Decididos a que viajará ,con Levitt aportamos el dinero que faltaba.
Enterada del esfuerzo, Fabiana no sabía cómo agradecer esta oportunidad.
Días antes de partir, llorando, nos propuso firmar un contrato donde fuéramos sus representantes de por vida.
Nosotros no aceptamos firmarlo porque pensamos que eso la iba a limitar en su desarrollo en Europa y sobretodo en un medio que no manejábamos
Viajó, estudió con la mayor estrella de la canción lírica que pudiera imaginar ,en Modena , le pagaron el pasaje a EUA y fue una de las ganadoras del Festival.
Este cuento se asemeja a La Cenicienta ,una joven que trabajaba como empleada doméstica que nace con esas condiciones y se le da la posibilidad de estudiar y ser apadrinada por uno de los más grandes artistas del mundo.
Por momentos y si entráramos en los detalles ,se hace más increíble.
El 1999 y dada lo proyección de esta cantante internacional, fue nominada por la secretaria de cultura Argentina y la revista Gente ,como Mujer Argentina del Año por su remarcable contribución al arte.
Volvió a buscar el premio y la contraté para cantar el himno en la apertura del Festival de Cosquin y también a abrir el Juego de las estrellas de básquet en Mar del Plata.
Desde esa época no tengo más noticias.
Fue triste para los que abrimos ese camino ,no saber más de ella.
Nos daba mucho placer su triunfo.
Hay gente que con el éxito se le olvida cómo fue que comenzó y quienes fueron sus mentores.
Escasa de memoria.
Pero esa es otra historia.
2 comentarios en “Qué hago escribiendo?”
Acá en Maldonado tampoco lo conocemos, pero la historia es genial. Esperamos ansiosos la próxima
Acá en Rocha también nos preguntamos qué haces escribiendo,si no te conoce nadie.