Las llamas consumieron íntegramente la vivienda de un humilde vecino y en pocas horas recibió el apoyo de obreros, electricistas y carpinteros honorarios.
La nueva edificación se realizará con materiales municipales y el aporte de los voluntarios
Roberto Fernández es un humilde habitante de Pueblo Villa Sara, ubicado en los accesos a la ciudad de Treinta y Tres por la ruta nacional nº 8.
Días atrás, un incendio arrasó con la totalidad de su vivienda; un construcción precaria, la cual configuraba todo su patrimonio.
Sustentado por changas, a las que logra acceder de manera intermitente, Roberto contaba con lo esencial, dentro de su hogar, pero que redundaba en su contención habitacional.
Ante el estupor de la comunidad, las lenguas de fuego se propagaron con tal celeridad que fue imposible salvar nada de lo que contenía la vivienda.
De un momento a otro, Roberto Fernández quedó, únicamente, con las ropas que portaba al momento de registrarse el siniestro, y en consecuencia, sintió su mundo, construido a sacrificio y trabajo, desmoronarse.
Sin embargo, una vez que personal del destacamento de bomberos extinguió el fuego, la alcaldesa de la localidad, Analía Larrañaga, estableció contacto inmediato con la directora de Desarrollo Social de la Intendencia, Cra. Daniel Elosegui.
En diálogo con Diario El Este, Larrañaga indicó que “afortunadamente no hubo lesionados, pero las pérdidas fueron totales. Si bien los bomberos llegaron rápidamente, el fuego estaba tan avanzado que no se pudo recuperar nada. Cuando supe de la situación, me presenté en el lugar, con el fin de buscar algún tipo de solución; me comuniqué directamente con Sociales, con Daniela Elosegui, su directora, e inmediatamente se le acercó lo necesario para pasar la noche, ya que una hermana del damnificado le brindó alojamiento en su casa”.
La alcaldesa agregó que tanto la respuesta institucional como la colaboración de voluntarios, no tardó en hacerse esperar.

“Ya a la mañana siguiente del incendio, un equipo técnico de la Dirección de Desarrollo Social, se acercó al lugar, a los efectos de relevar el estado del inmueble, verificando tal deterioro que se determinó la necesidad de realizar una nueva edificación”, señaló.
Así mismo, sorprendió gratamente la sensibilidad de la comunidad a quien la propia Analía Larrañaga agradeció a través de El Este. “Quiero destacar la colaboración de toda la sociedad de Villa Sara y Treinta y Tres, que se han mostrado muy solidaria, del comunicador Luis Rolando Pérez, quien, a través de su grupo solidario “Los Indestructibles”, ha logrado contar con personal para la mano de obra y múltiples donaciones que se le han acercado a Fernández”.
Por su parte, la Directora de Sociales, Cra. Elosegui confirmó las actuaciones al tiempo de agregar que “ya se confeccionó el expediente y se envió una arquitecta para realizar el relevamiento. En estas horas estamos a la espera de la documentación que verifique la titularidad del terreno, por parte del damnificado, que certifique la autorización para construir en el mismo. Una vez que se cuente con estos documentos, se comenzará a generar la solicitud de compras de los materiales necesarios y que ya fueron determinados por el equipo técnico” indicó.
La jerarca agregó que si bien ya se ha presentado una nómina de voluntarios para la edificación, la Intendencia enviará operarios a cargo de un capataz de obra para supervisar los trabajos.
Uno de los detalles más emotivos de esta espontánea campaña solidaria surgida desde los vecinos, está centrada en la familia de Mateo Terra, un pequeño de 3 años de edad para quien se viene llevando adelante una cruzada de apoyo, dado que se necesitan reunir 250 mil dólares para corregir, a través de cirugías, una malformación que le impide movilizarse con normalidad, dado que nació con tres dedos en uno de sus pies y su pierna derecha con menores dimensiones que la izquierda.
La complejidad laboral y económica que atraviesa gran parte de la sociedad, ha hecho que las donaciones, para intervenirlo en Miami, Estados Unidos, sean contabilizas peso a peso, debido a la magnitud de la cifra que se quiere.
Sin embargo, al enterarse de la situación extrema en la cual había quedado Roberto Fernández, los padres de Mateo se comunicaron con Luis Rolando Pérez y le solicitaron que el dinero reunido en los últimos días, unos 7.500 pesos uruguayos, fueran entregados a ese hombre para que pudiera darles la utilidad que considere frente a tales circunstancias.
Pero ¿quiénes son Los Indestructibles?. Diario El Este se comunicó con su referente, popularmente conocido como “Perecito”, quien señaló que se trata de un grupo de 6 y 7 amigos, quienes han tomado algunas causas sociales, logrando solucionar necesidades en servicio de la comunidad.

A modo de ejemplo explicó que “En realidad, un día decidí hablar con estos amigos y armar un grupo con el cual construimos la primer casita en el Barrio Isaac de León para una señora que lo necesitaba, luego hicimos un baño en Villa Sara y unas piezas; y allí, a alguien se le ocurrió poner el nombre “Los Indestructibles”, porque éramos un puñado de personas. Más adelante hicimos la casita de Lilo Fleitas, en el Barrio Benteveo y recientemente el merendero en el Barrio Nelsa Gómez”.
En este último caso, inicialmente, la idea era construir un techo, pero las acciones se fueron multiplicando. Así que pasaron al cerramiento perimetral, posteriormente el piso, luego se construyó un baño y finalmente una mesada; al tiempo de conseguir heladera, cocina, mesa, sillas y otros artículos para el equipamiento que requería el merendero. Así mismo, se están reuniendo libros donados para hacer en ese mismo salón, un rincón de lectura.
“Aquí hay que destacar a la gente, que siempre está dispuesta a colaborar. Ahora, para Mateo tenemos un remate televisado, para el cual no sabés la enorme cantidad de donaciones que nos han acercado. Rescato artículos de todos los voluntarios y luego hacemos el remate; pero eso no es obra mía, es la población que colabora” agrega el comunicador, que a través de un micrófono ha impulsado campañas solidarias de magnitud.